Día de estreno en la pesca desde pato. Nunca me he sentido muy seguro de estos artefactos; me ha dado un poco de "yuyu" ir solo, pateando y sin más seguridad que el chaleco salvavidas.
No ha sido muy difícil cogerle el truquillo a la navegación, aunque es cierto que no me he alejado mucho de la orilla y del lugar donde dejé el coche. También es cierto que el día ha sido ideal para el bautismo, sin nada de aire, lo cual facilitaba la toma de contacto y los ejercicios que tenía que realizar: Giros, estabilidad, cambio de moscas...
No he probado el cañero que he fabricado para él y que en tierra firme parece bastante cómodo y estable. Si que he comprobado que los soportes de las cañas son válidos tanto para cañas de spinning como para las de mosca (no son los de la foto). Creo que con 3 soportes voy despachado.
Habrá que dejar para más adelante excursiones algo más distantes, esperando que algún otro compañero de pesca quiera acompañarme.
Tengo muy claro que no es un útil de navegación para cubrir grandes distancias, para eso ya está el kayak, aunque si lo veo ideal para pescar esos sitios cercanos que no se pueden pescar desde la orilla.
Aunque estaba más preocupado en el manejo del pato (muy cómodo por cierto) he tenido tiempo de hacer algunos lances y capturar mi primera pieza desde pato: Un bonito bass de unos 30 cms. que entró franco al señuelo. Pensando que iban a ser los poppers los más exitosos, he cometido el error de llevar una caña para línea 4, pero que con moscas más plomadas es difícil de manejar. Y es que los basses no quieren saber nada de lo que ocurre arriba, siguen pegados al fondo aunque en zonas de agua más someras.
