domingo, 8 de enero de 2012

Piometra

La entrada del nuevo año no ha sido muy feliz. Nada más volver de la guardia del día 31 de Diciembre encontré a Kala muy enferma. Desde 3 días antes padecía de diarrea y algún vómito, aunque lo más preocupante fue la inflamación de todo el abdomen, que casi le imposibilitaba andar. Buscar al veterinario y operarla casi de urgencia fue la única alternativa para solucionar el problema. Lo que parecía una infección intestinal dio la cara en forma de piometra. La extirpación de útero y ovarios fue la única solución.
Gracias a Dios ya se encuentra bastante recuperada; espero que siga dándonos alegrías que solo una perra a la que tanto quiere toda la familia es capaz de dar, no solo en la caza sino en la convivencia diaria






Pasada ya casi una semana de la intervención me permití la "licencia" de descansar, asistiendo junto a mi socio Álvaro a una batida de cochinos en las Alpujarras granadinas, concretamente en el pueblo de Soportújar. Era la segunda jornada de caza mayor de la temporada e iba con ilusión, con ganas de despejar la cabeza de problemas laborales y familiares. El día acompañaba, con un sol espléndido, aunque en aquellas alturas una brisa te helaba hasta el tuétano si te quedabas en la umbría.

Nos correspondió el puesto más alto de la batida, cerrando un barranco lindero con el Parque Nacional de Sierra Nevada. En esta ocasión cazamos con el rifle de mi socio, un
Sauer 202 en calibre 30.06, turnándonos en la postura cada 30 minutos; una postura con tiradero complicado, con muchos pinos que dificultaban el tiro, aunque a priori parecía bastante querenciosa para la huida de los cochinos.

A estas alturas del año toda la zona debiera estar cubierta de nieve, pero la pertinaz sequía no solo no dejó su blanco manto sino que el campo estaba reseco, con caminos
polvorientos y un feo color de la tierra y de la vegetación.
Al final no vimos pelo, como es habitual, aunque hubo un tiroteo interesante, cobrándose una veintena de marranos.

Algún día cambiará nuestra suerte.





6 comentarios:

  1. Espero y deseo la total recuperación de Kala lo antes posible. Un saludo.

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  3. Hola Jose Antonio. Aunque nuestros queridos perros no son seres humanos, por ellos sentimos un cariño especial y situaciones como esta, operaciones, accidentes.... suponen un duro trance para todos. Como sabes mi braco sufrió varias operaciones y estuvo a punto de ser sacrificado con apenas un año. Y se lo que estás pasando. Y ánimo ! que ya pasó lo peor......

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  4. Gracias a los dos por vuestros comentarios.
    La perra ya está muy recuperada, y empieza a hacer de las suyas de nuevo....
    Saludos.

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  5. A la mía también la tuvieron que extirparle el ovario y el útero por otras razones, ya hace 4 años que esta operada y se encuentra formidable tanto como para la caza como para convivencia, que por supuesto, estoy de acuerdo que no son personas y por eso se les tiene un cariño especia como dice Carlos, para mi en concreto, es mas que una perra d compañía y un compañero de caza. Me alegro que este recuperada Jose Antonio. Un saludo

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  6. No ver pelo es algo normal, te metio el calino el señor de las pieles.
    tes sin tocar pelo y en buenos sitios abrazos Jose Antonio o meico como te dice el del kalino

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